Pinguécula
¿Qué son los pterigión y la pinguécula?
El pterigión y la pinguécula son 2 lesiones benignas, caracterizadas por un crecimiento anormal de la conjuntiva, localizadas habitualmente en el vértice interno del ojo.
La diferencia entre estas dos lesiones consiste en que la pinguécula nunca invade la córnea, no como el pterigión que característicamente avanza hacia el área pupilar y llega, en casos avanzados, a amenazar la visión.
Síntomas
La mayoría de los pacientes consultan al oftalmólogo debido a la aparición de un bulto o un engrosamiento en el vértice interno del ojo, que suele enrojecerse con frecuencia y presentar picazón, escozor o lagrimeo.
En casos de pterigión avanzado, los pacientes también pueden experimentar pérdida de visión.
Causas y factores de riesgo
Los principales factores relacionados con la aparición del pterigión y la pinguécula son la exposición solar y la sequedad del ambiente. Por este motivo en regiones con este tipo de clima (América del Sur o África del Norte) estas patologías son mucho más frecuentes y además aparecen en edades avanzadas.
Otro factor que se asocia es la predisposición genética, que es más habitual en personas con antecedentes familiares en estas lesiones.
¿Es posible prevenirlos?
Sí. Sobre todo protegiéndose del sol con gafas solares, especialmente en verano, cuando acudimos a lugares con mucho reflejo como el mar o la nieve. En casos de sequedad ocular, utilizando colirios de lágrimas artificiales.
Tratamiento del pterigion y la pingüécula
El tratamiento varía en función del tipo de lesión:
- Por norma general, la pinguécula no es necesario tratarla quirúrgicamente. Siempre se trata de forma médica con colirios antiinflamatorios y lágrimas artificiales. La cirugía es excepcional y se reserva sólo en pacientes que no responden al tratamiento médico.
- En el pterigión la indicación quirúrgica es frecuente, puesto que tiene tendencia a crecer de forma progresiva e invade la córnea en la mayoría de los pacientes.